Repunta ventas de casas en EEUU

El precio medio de venta de las casas usadas en julio en EEUU fue de 234.000 dólares, lo que representa un aumento del 5,6% con respecto al de un año antes.

El ritmo de venta de casas nuevas en Estados Unidos crece un 5,4% en julio, hasta alcanzar una cifra ajustada anual de 507.000 unidades, según informó hoy el Departamento de Comercio. El aumento del mes anterior siguió a la caída del 7,7% en las ventas registrada en junio, cuando la tasa anual quedó en una cifra revisada de 481.000 unidades.

La venta de casas usadas en Estados Unidos aumentó un 2% en julio y quedó en un ritmo anual de 5,59 millones de unidades, informó la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés). Así, en julio se consolidó la aceleración de las ventas y se alcanzó el mayor ritmo desde febrero de 2007.

 

Además, las ventas han crecido en torno a un 10% durante el último año y julio es el quinto mes consecutivo en el que la tasa fue superior a los 5 millones de unidades, lo que refleja la recuperación del mercado inmobiliario.

El precio medio de venta de las casas usadas en julio fue de 234.000 dólares, lo que representa un aumento del 5,6% con respecto al de un año antes, según el informe.

Además, el mes pasado el inventario de casas usadas puestas a la venta quedó en 2,24 millones de unidades, que al ritmo de venta actual tardarían 4,8 meses en agotarse.

Mientras, el inventario de casas nuevas, al ritmo actual de venta, se prolongaría 5,2 meses frente a los 5,3 meses de junio. Las casas nuevas en EEUU representan aproximadamente el 8% del mercado de vivienda residencial.

Los compradores han acudido este año al mercado de viviendas. Basándose en un crecimiento sólido del empleo en los dos últimos años y tasas hipotecarias relativamente bajas, las ventas de casas nuevas subieron 21.2% en el primer semestre del 2015.

Las viviendas vuelven a impulsar el crecimiento económico en momentos en que ha caído la bolsa. Los estadounidenses se han sentido más confiados en sus perspectivas económicas, lo que les hace retornar al mercado inmobiliario que fue la chispa inicial de la gran recesión a fines del 2007. Pero la disponibilidad de casas nuevas y existentes ha sido apretada, lo que aumenta los precios y limita las opciones para los compradores.